En el Día Mundial de los Océanos, la Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS) publicó un informe histórico destinado a hacer frente a una importante amenaza para las especies marinas: la contaminación acústica. Se sabe que la contaminación acústica causa importantes perturbaciones a la fauna marina, incluidas las especies migratorias protegidas por la CMS, como las ballenas y los delfines (y sus presas). Tales impactos pueden provocar cambios adversos en ecosistemas marinos enteros.